Congreso Internacional de Comunicación Política
29 mayo, 2017
Los pasados días 23 y 24 de mayo, en el coqueto y moderno edificio que posee la Universidad Católica Argentina en su sede en Capital Federal (Buenos Aires), específicamente en Puerto Madero, más de treinta expertos procedentes de distintos países latinoamericanos brindaron sus conferencias magistrales a los 1100 asistentes. Apoyaron la iniciativa de la Cumbre Mundial, la Asociación Latinoamericana de Consultores Políticos (ALACOP) y la Asociación Argentina de Consultores Políticos (ASACOP).
La amplitud de temas como la diversidad de enfoques sobre cómo encarar un proceso electoral en tiempos de campañas legislativas fue motivo de debate en dicho evento de capacitación y entrenamiento para consultores, investigadores y periodistas, donde se destacó un dilema sin resolver: la sociedad necesita de los políticos soluciones para sus problemas. Es decir, política por sobre comunicación, tal y como afirmó Daniel Ivoskus Presidente de la Cumbre Mundial de Comunicación Política en la inauguración del evento.
«Tenemos que construir nuestra actividad de consultoría sobre valores y principios éticos fuertes» fue la contundente afirmación de Julio Pizetti, Presidente de ASACOP, la que marcó la apertura del congreso y sembró un camino para pensar el contenido en el resto de las jornadas.
El tema liderazgo fue abordado desde la impronta enérgica y dinámica del consultor español Antonio Sola, quien es apodado como el “Hacedor de Presidentes”, resaltando la importancia de los atributos de atracción y las formas de persuasión. Por su parte, Paz Ballivian (Bolivia) describió el perfil ideal de un legislador, quien en sus palabras tiene que trabajar sobre una ley distintiva y trabajar en diferentes formas de fiscalizar la actividad política. En el mismo orden, Fernando Mejorado de Méjico ilustró cómo perder el control de la campaña, ofreciendo variados ejemplos de ello: hacer campañas generalistas, pensar en el candidato como héroe y no en los ciudadanos, hacer marketing sin política y desgastar al equipo, entre otras descripciones.
El reconocido consultor argentino Mario Riorda enfatizó en la falta de convergencia en el uso mediático de las campañas políticas, siendo esta fundamental para pensar una estrategia sustentable y eficaz. Afirmó que los gobiernos piensan en modo analógico mientras los ciudadanos son digitales.
El uso de la palabra, la oratoria y las estrategias discursivas, también dijeron presente entre los conferencistas. Antonio Di Genova y Fernando Menéndez, ambos de Argentina abordaron ello destacando los modelos informativo asertivo y persuasivo emocional, donde el tono argumental es el que prima en el primero, mientras que la empatía lo hace en el segundo. También se resaltó la importancia de “contabilizar la pronunciación de un solo Yo por sobre cada diez Usted/es”. En tanto, Jorge Geréz (Brasil) reafirmó la eficacia de la utilización del Storytelling como recurso narrativo que construye un relato con todos sus componentes y matices.
Desde la óptica de la estrategia, quien trabajara para la victoria del último presidente electo del Perú (Pedro Pablo Kuczynski), Maximiliano Aguiar (Argentina) destacó la importancia de abordar una tríada compuesta por Investigación, Estrategia y Acción, todas ellas retroalimentadas bajo una serie de pasos como la descripción del tipo de elección, el clima de opinión, el escenario electoral, las herramientas de campaña y la estrategia discursiva. En el mismo orden, el psicólogo político Daniel Eskibel (Uruguay) subrayó el uso del Identikit para conocer los cinco grandes rasgos de la personalidad de los votantes, para de este modo actuar persuasivamente en favor del electorado.
Por otra parte, el experimentado consultor argentino Carlos Fara brindó en su conferencia “Cómo hacer campañas desde la oposición legislativa” una observación pertinente en tiempos de campañas negativas “no hay que criticar todo el tiempo, la negatividad en el emisor hace que este pierda credibilidad”.
En el panel de opinión pública, los encuestadores argentinos Gustavo Córdoba y Federico Posadas, brindaron dos tópicos centrales de la actividad: la incapacidad de las metodologías para predecir el futuro es decir quién va a ganar en las elecciones y la importancia de trabajar en clave local para las campañas municipales.
Retomando el tema liderazgo, desde el país trasandino (Chile), Fernando García Naddaf dictaminó que los nuevos líderes tienen una retórica y una estética opuesta a los partidos políticos tradicionales, lo cual los lleva a diferenciarse claramente del resto de los aspirantes a serlo. Como complemento, el publicista argentino Jorge Imhof con su ponencia “Somos 70% emoción” y mostrando distintas piezas audiovisuales sostuvo que a partir de la conexión emocional se puede influir al público, en este caso a los electores, siempre asumiendo riesgos en lo que a comunicación se refiere, específicamente poniéndonos en el lugar del otro.
A modo de cierre de las jornadas, se desarrolló el panel Desafíos Mujer y Política, iniciando su presentación la investigadora brasilera Luciana Panke reafirmando su compromiso con el tratamiento equitativo hacia la mujer política, ya que en sus estudios académicos encontró que en reiteradas oportunidades existen operaciones simbólicas en contra de la mujer; sostuvo que “hace falta que se naturalice la participación en política de la mujer”. En segundo orden, Marilú Brajer (Argentina), describió la principal diferencia a la hora de realizar campañas para mujeres “el cerebro femenino es más emocional y empático en comparación con el masculino”.
En tanto Daniela Aruj (Argentina) sostuvo que “el cuerpo es más genuino que la palabra”, haciendo alusión a la importancia de trabajar coherentemente la comunicación no verbal con la verbal. Para finalizar, una de las pioneras en el campo de la opinión pública argentina, la encuestadora Analía del Franco hizo énfasis que la primordial demanda hacia un legislador está asociada a los liderazgos femeninos, destacando los principales atributos de ellos: honestidad, sinceridad, trabajo, perseverancia, credibilidad y valentía, entre otros.
Llegados a esta parte, resulta imprescindible reflexionar sobre una paradoja: transitamos tiempos donde la política (en minúsculas) presenta uno de los niveles más bajos de adhesión por parte de los ciudadanos, donde las instituciones menos valoradas son las de raigambre política y que en las últimas dos décadas los afiliados a los partidos tradicionales son cada vez menos. Pese a todo ello, la comunicación política ha iniciado un camino hacia la profesionalización, no sólo para ganar elecciones, sino para elevar la vara con la que se mide a los funcionarios políticos. Su abordaje y adecuado tratamiento es el que aporta para el crecimiento de las democracias modernas.